Luxación de hombro, al intentar detener una caída frontal o lateral, el apoyar la mano sobre el suelo, puede condicionar que la cabeza del humero, salga de su lugar, o llegar a fracturarla.

Luxación acromioclavicular. Es la ruptura de ligamentos que mantienen la clavícula en su sitio. Los impactos de gran energía producidos al golpear directamente el piso, es lo que convierte a estos deportistas en blanco fácil de este tipo de lesión.

Al ser un deporte de velocidad, esta lesión se puede presentar al sufrir una caída en una vía, o ser golpeado directamente por un vehículo de motor en la rodilla.

Múltiples fracturas incluso expuestas. La alta energía que se desprende al ser impactado por un  vehículo de motor en movimiento a alta velocidad, predispone a que el paciente pueda presentar fracturas prácticamente en cualquier parte del cuerpo, en hombro, brazos, manos o piernas, incluso pudiendo llegar a ser estas expuestas, es decir, donde el hueso llega a perforar la piel, pudiendo quedar el hueso a la interperie.

Lesiones musculares, el  sobreesfuerzo  sobre todo en competiciones de alto nivel, donde se exige mayor carga muscular de la habitual, es donde se suelen presentar rupturas parciales de las fibras musculares. En ocasiones son necesarias realizar un ultrasonido o resonancia magnética para identificar la magnitud de la lesión.

Requiere de un reposo absoluto de la actividad, hielo local, antiinflamatorios y una vigilancia por un ortopedista certificado, quien probablemente recomiende un programa de fisioterapia, antes de reiniciar tus actividades deportivas. Son necesarios un buen calentamiento y estiramiento para evitar estas lesiones.